Estilo Dibujistico: está pintada todavía en un tono enteramente naturalista, con un sistema de iluminación que recuerda el tenebrismo, de la generación anterior, lleno de ecos de intimismo Zurbaranesco y de cierta enérgica factura en los objetos inanimados, como en la cesta y las telas.
ANÁLISIS FORMAL:
LA COMPOSICIÓN: en autor ha sabido ofrecer una interpretación muy personal y ha situado la figura en el plano justo, para dar una gran unidad al sistema narrativo. La figura de San José marca un ritmo ondulante hacia el fondo. Todos los personajes que intervienen en la escena participan de una misma acción y se relacionan entre ellos de manera fluida.
LOS PERSONAJES: Son figuras elegantes. Aunque representada con realismo, la figura de San José, monumental, atiende solícitamente al niño, que con gracioso movimiento juega con el perrito, la Virgen, al fondo, ha dejado de hilar para llevarse una manzana a la boca.
EL MOVIMIENTO: toda la escena está dotada de gran dinamismo, los personajes hablan y se comunican entre ellos: desde el perro, que atiende expectante el juego del niño hasta San José, que mantiene a Jesús en su regazo haciendo un gesto de explicación con la mano derecha.
LA LUZ: el protagonista, que es el niño, está iluminado por un potente foco de luz procedente de la izquierda, que provoca contrastes, dejando el fondo en total penumbra y sobre el que se recortan las figuras modeladas por la luz y la sombra; no obstante, la luz es matizada y supera el estricto tenebrismo.
LOS COLORES: el colorido empleado es el que caracteriza esta primera etapa, siguiendo el estilo de los naturalistas, con una gama cromática que en su mayor parte se mueve en el entorno de los pardos.
LA INTENCIÓN DEL AUTOR:Es crear el hogar como medio natural para la iniciación de los hijos en el amor fraterno y el respeto mutuo.
VIDEO LA SAGRADA FAMILIA (GRUPO Compasión)
FUENTES EMPLEADAS:
Jesús en el Museo del Prado por Alicia Pérez Tripiana y María Ángeles Sobrino López
Es uno de los episodios más brutales de la historia bíblica: los soldados del rey Herodes matan a los recién nacidos de Judea para que ninguno se convierta en el Mesías. Pieter Paul Rubens lo pintó con toda clase de detalles, lo dotó de una luminosidad casi irreal y lo convirtió en una obra maestra por la que pagaron más de 76 millones de dólares. Dicen que fue el pintor barroco más destacado de la escuela flamenca
LINK AL MUSEO DEL PRADO AUTOR: Pedro Pablo Rubens (Siegen, Colonia, 1577-Amberes 1640) NACIONALIDAD: Flamenca TÉCNICA: Oleo sobre lienzo ESTILO: Barroco, Escuela flamenca siglo XVIII
TÉCNICA ARTÍSTICA: Estilo colorista-pictórico: Una de las composiciones mas aparatosas y dinámicas del Barroco en donde luz, color y dinamismo se unen para compartir el cuadro en una de las obras maestras del pintor.
ANÁLISIS FORMAL:
La Composición: la composición original, cerrada por las figuras de los extremos, está pintada en 1609. La composición de 1628 es abierta y dinámica a través de una gran diagonal que cruza el cuadro desde el ángulo inferior izquierdo hasta el ángulo superior derecho.
Los Personajes: la cantidad de figuras sorprende al espectador. El propio artista se autorretrata en la zona derecha, para no perderse en extraordinario acontecimiento
El Movimiento: La agitación y el dinamismo del momento están perfectamente captados en los numerosos contrapostos y escorzos de los personajes, siendo las masas musculares y en tensión de alguna de las figuras un homenaje a uno de los artistas mas importantes del Renacimiento, Miguel Ángel BUONAROTTI.
La Luz: El niño Jesús es el foco desde donde parte la luz, iluminando los rostros de los Reyes Magos y sus Pajes. La Atmosfera que ha obtenido el maestro con el juego de luces provenientes de las antorchas y los brillos de telas y objetos decorativos hacen de esta escena nocturna un autentico alarde en su tratamiento.
Los Colores: la influencia veneciana del siglo XVI, se aprecia en la riquísima paleta en donde los extraordinarios púrpuras, amarillos, azules y blancos, unidos a la textura de los materiales, hacen que la obra se convierta en una de las mas opulentas de toda su producción.
La intención del autor es mostrarnos a través del dinamismo y la tensión emocional del cuadro el esperado encuentro con el Mesías, después de un largo tiempo de incertidumbre y búsqueda, en claro paralelismo con el propio camino del Cristiano hacia el encuentro personal con Dios.
Fuente: Libro Jesús en el Museo del Prado (Pérez Tripiana, Alicia y Sobrino López, María Ángeles)